La vacunación de las mascotas ha llegado a convertirse en
algo rutinario, tanto que creo que nosotros y otros compañeros de profesión lo
hemos descuidado.
El año pasado nos
pusimos a preparar el año 2014, replanteando nuevas estrategias preventivas, ya
conocéis nuestras campañas, de esterilización preventiva y #perrosymosquitos y
se nos pasó por la cabeza repasar nuestro protocolo vacunal; no lo habíamos cambiado desde que empezamos en
2009 y la verdad, es que aparentemente
no había motivos, pero para nuestra sorpresa si había cambios que hacer.
Empezamos una labor de investigación buscando protocolos de
otros compañeros y comparándolos con el nuestro, mirando las enfermedades más
comunes de Jaén, llamando a los laboratorios que fabrican las vacunas que
usamos y aprendiendo sobre su duración y recomendaciones, y finalmente decidimos cambiar todo nuestro
protocolo y establecer el más adecuado para mantener la salud de vuestros
compañeros a salvo sin sobrevacunar, que es lo que estábamos haciendo hasta
ahora.
Siguiendo las recomendaciones de la WSAVA (siglas en inglés
de la Asociación mundial de veterinarios de pequeños animales) que son estas: http://www.wsava.org/sites/default/files/VaccinationGuidelines2010.pdf,
hemos establecido unos nuevos protocolos, aprovechando al
máximo la inmunidad que confiere cada vacuna a vuestra mascota, y teniendo que
usar las menos dosis posibles.
Los cambios más significativos afectan a perros y gatos
adultos, que van a pasar a vacunarse cada dos y tres años, salvo de la rabia,
que es obligatoria y anual en Andalucía http://www.juntadeandalucia.es/boja/2010/81/18, y de la leptospirosis en el caso de los perros.
De esta manera, evitaremos sobrevacunar a vuestras mascotas
y a la par conseguiremos que estén perfectamente protegidas frente a todas las
enfermedades contra las que existe una vacuna.
